El término AJAX significa “Asynchronous JavaScript and XML” (JavaScript asíncrono y XML), y se trata de una técnica que está basada en la tecnología JavaScript, la cual modifica la comunicación con el servidor y se encarga de aumentar la velocidad de las apps, consiguiendo que estas funcionen de forma asíncrona, así como que intercambien datos con el servidor en segundo plano sin que sea necesario recargar la página.
La tecnología AJAX asegura que aparezcan grandes partes de la página HTML de forma automática, al mismo tiempo que las solicitudes del usuario se gestionan el segundo plano en el servidor. Además, la interfaz de usuario se actualiza pieza por pieza cuando sea necesario.
De esta forma, tan solo hay que recargar aquellos datos que sean necesarios, y no toda la web con cada clic. De hecho, desde 2005, muchas apps han podido ver la luz gracias a AJAX, al no ser necesario que los usuarios recargasen toda la página.
Componentes de la tecnología AJAX
Hay que dejar claro que la tecnología AJAX no es un lenguaje de programación, sino que se trata de una combinación de diferentes estándares ya existentes.
Tal y como indicó Jesse James Garret, que fue la persona encargada de bautizar esta tecnología con el nombre AJAX, debe incluir las siguientes tecnologías:
- HTML y CSS: necesarias para desarrollar y formatear los formularios web.
- Documentos Object Model (MOD): esta tecnología es indispensable para la interacción de los datos.
- XML: necesaria para intercambiar datos.
- JavaScript: es la pieza central del código, necesaria para mantener comunicaciones con el servidor.
Diferencias con la app tradicional
La principal diferencia está en que la app tradicional almacena grandes cantidades de datos en una sola vez para cada entrada de los usuarios. De este modo, las pausas se llevan a cabo durante la ejecución.
Por otro lado, AJAX guarda los datos en buffers de forma repetida, por lo que únicamente hay que recargar ciertas partes de la interfaz de usuario. Así, se consigue reducir el tiempo perdido en las interrupciones de la conexión.
Hasta la aparición de la tecnología AJAX, la interacción entre servidores y usuarios estaba marcada por unas peticiones excesivamente largas desde el navegador al servidor, lo que provocaba que los usuarios tuvieran que esperar largos procesos de almacenamiento de datos para recibir una respuesta.
Ahora, AJAX acaba con cualquier retraso, ya que actúa directamente en el navegador y realiza las operaciones sin que sea necesario consultar cada vez al servidor. Además, permite modificar la interfaz de usuario, hasta cuando envía y recibe los datos desde el servidor, consiguiendo que el intercambio de datos con el servidor se lleve a cabo de forma independiente a la entrada del usuario.
Ejemplos de aplicaciones con AJAX
Actualmente, prácticamente cualquier navegador web en su versión más reciente es capaz de ejecutar AJAX. Entre las múltiples apps de AJAX, Google Suggest destaca como una de las más populares.
Pero no es la única, ya que hay infinidad de ejemplos de AJAX:
- Sistemas de votación y calificación.
- Salas de chat.
- Notificación de tendencias de Twitter.
Y, en cuanto a SEO, es importante comprobar que el contenido de la web siga siendo rastreable para Google y el resto de motores de búsqueda al utilizar AJAX.
